La explicación más sencilla de la tecnología ‘blockchain’ -y quizá la mejor- es pensar en ella como pensamos en la electricidad: aunque solo veas sus resultados, entiendes lo importante que es, y sabes que tiene muchísimos usos. Como cualquier otra tecnología, ha evolucionado hacia un estado de mayor madurez. Empezamos con ‘blockchain’ 1.0 y ahora ya estamos en ‘blockchain’ 4.0.
Pasamos a explicar cada versión del ‘blockchain’:
Blockchain 1.0 – Cryptomonedas
La primera aplicación de tecnología ‘blockchain’ fue la criptomoneda ‘bitcoin’. De hecho, la ‘blockchain’ se ha consolidado como facilitador de un ‘Internet del dinero’ al impulsar las criptomonedas. Al proporcionar transparencia, responsabilidad, inmutabilidad y seguridad, la ‘blockchain’ desencadenó la afluencia de más criptomonedas, y hoy ya existen más de 10.000 en circulación.
Tipos de criptomoneda
- Moneda digital emitida por banco central
- ‘Stablecoins’
- Criptomonedas (Bitcoin, Ethereum, Solana, …)
- Criptomonedas impulsadas por ‘memes’
* El número máximo de ‘bitcoin’ es de 21 millones; ya existen unos 19 millones en el mercado.
Blockchain 2.0 – Contratos inteligentes
Con ‘blockchain 2.0’ irrumpieron los contratos inteligentes, ampliando la funcionalidad de esta tecnología más allá de las criptomonedas.
¿Qué es un contrato inteligente?
- Un contrato inteligente es un acuerdo automatizado entre el creador del contrato y el receptor.
- Este acuerdo, escrito como un programa informático, se incorpora a la ‘blockchain’, y se hace inmutable e irreversible.
- Suele utilizarse para automatizar la ejecución de un acuerdo de modo que de inmediato todas las partes puedan estar seguras del resultado, sin necesidad de intermediarios.
- También se puede automatizar un flujo de trabajo, que se inicia cuando se cumplen determinadas condiciones.
Una de las ventajas de un contrato inteligente es la automatización de tareas que tradicionalmente requieren la intervención de un tercero. Por ejemplo, en lugar de necesitar que un banco apruebe una transferencia de fondos de un cliente a un colaborador autónomo o ‘freelance’, el proceso ocurre de forma automática, gracias a un contrato inteligente. Lo único que hace falta es que las partes se pongan de acuerdo sobre el concepto.
Los contratos inteligentes ofrecen un gran atractivo porque no son alterables de forma ilegítima, reducen el coste de la verificación, la excepción, el arbitraje y la protección contra el fraude, admiten la ejecución automatizada sin necesidad de permisos y permiten el registro transparente de datos de modo fácilmente verificable, lo cual proporciona a las partes implicadas igualdad de soberanía sobre sus acuerdos.
La muy extendida Ethereum, por ejemplo, es una ‘blockchain’ de segunda generación. Para impulsar la funcionalidad de los contratos inteligentes, Ethereum es la ‘blockchain’ de referencia en todos los sectores, especialmente en materia de cadena de suministro, logística y pagos transfronterizos.
A pesar de ser una ‘blockchain’ de segunda generación, Ethereum ha estado continuamente a la vanguardia, ampliando las funcionalidades entodos los sectores y liderando el desarrollo de los contratos inteligentes, las ‘dApps’, la tokenización de activos y las ‘DAO’ (organizaciones autónomas descentralizadas), las ‘DeFi’ (finanzas descentralizadas) y los ‘NFT’ (tokens no fungibles).
Blockchain 3.0 – DApps
‘Blockchain 3.0’ introduce las ‘apps’ descentralizadas o ‘Dapps’.
Las aplicaciones descentralizadas (‘Dapps’), que existen desde la aparición de las redes P2P (‘peer to peer’, de igual a igual), están diseñadas para existir en Internet sin que estén controladas por ninguna entidad en concreto, y, por tanto, se ejecutan en una red P2P en lugar de en un único ordenador.
Con una interfaz de usuario ‘frontend’ que invoca a contratos inteligentes ‘backend’ alojados de forma descentralizada, las ‘DApps’ impulsan distintas finalidades de la ‘blockchain’, como plataformas ‘DeFi’, plataformas de criptopréstamos, mercados de ‘NFT’, préstamos ‘P2P’ y otros.
Impulsados por nuevos mecanismos de consenso como ‘proof of stake’ o ‘proof of history’, los protocolos de ‘blockchain’ de tercera generación se centran en la velocidad, la seguridad, la escalabilidad, la interoperabilidad y la concienciación medioambiental.
Las ‘DApps’ han encontrado aplicaciones en verticales como los videojuegos, las finanzas, las redes sociales y las transacciones en criptomonedas, y, por ofrecer ventajas como transparencia, escalabilidad, flexibilidad y fiabilidad, se espera que el mercado global de ‘DApps’ alcance los 368.250 millones de dólares en 2027.
Blockchain 4.0
‘Blockchain 4.0’ se centra en la innovación. La velocidad, la experiencia del usuario y la usabilidad por parte de un público mucho más amplio serán las claves para la ‘blockchain 4.0’. Podemos clasificar las aplicaciones de ‘blockchain 4.0’ en dos verticales:
Web 3.0
Internet se transforma de forma constante: ya estamos de camino a la tercera generación de servicios en la red, impulsada por avances tecnológicos como IoT o ‘Internet de las cosas’, la ‘blockchain’ ya la inteligencia artificial. La Web 3.0 pone el foco en la descentralización, por lo que la tecnología ‘blockchain’ tiene un papel fundamental en su desarrollo.
La Web 2.0 ha sido revolucionaria en cuanto a abrir nuevas opciones de participación social, pero, para aprovechar estas oportunidades, los consumidores hemos volcado todos nuestros datos en sistemas centralizados, renunciando a nuestra privacidad y exponiéndonos a las ciberamenazas, ya que las plataformas de la Web 2.0 están gestionadas por entidades centralizadas que dictan las normas de las interacciones y, además, son propietarias de los datos de los usuarios.
La crisis financiera global de 2008 puso al descubierto las grietas del control centralizado, allanando el camino a la descentralización. El mundo necesita una plataforma en que el usuario mantiene el control, es decir, una Web 3.0, para crear una Internet autónoma, abierta e inteligente que se apoye en protocolos descentralizados, que la tecnología ‘blockchain’ puede proporcionar.
Ya existen algunas ‘blockchains’ de tercera generación diseñadas para ejecutar la Web 3.0, pero, con el auge de la ‘blockchain 4.0’, podemos esperar la aparición de aún más protocolos ‘blockchain’ de Web 3.0, que contarán con interoperabilidad cohesiva, automatización mediante contratos inteligentes, integración sin fisuras y almacenamiento resistente a la censura de archivos de datos P2P.
Metaverso
En los próximos años, viviremos la experiencia de los metaversos, un proyecto soñado por gigantes tecnológicos como Facebook, Microsoft, Nvidia y otros más, donde podremos explorar mundos virtuales a través de diferentes puntos de contacto, como la participación social, videojuegos, el trabajo, la creación de redes y muchas interacciones más. El metaverso hará que estas experiencias de interacción con otros usuarios en un entorno generado por ordenador sean más realistas y naturales.
Y, para crear esos espacios de realidad virtual del metaverso, entrarán en juego la IA avanzada, el Internet de las cosas, la realidad aumentada y realidad virtual, la computación en la nube y las tecnologías ‘blockchain’.
El metaverso centralizado conlleva un compromiso más intenso de los usuarios, un uso más amplio de los servicios de Internet y una mayor exposición de datos personales. Todos estos factores implican un mayor riesgo de ciberdelincuencia. Que el poder de regular, controlar y distribuir los datos personales de los usuarios quede en manos de organismos centralizados no es un modelo sostenible para el futuro del metaverso, por lo que se pone mucho énfasis en el desarrollo de plataformas descentralizadas que proporcionen autonomía a cada usuario. Por ejemplo, Decentraland, Axie Infinity y Starl son metaversos descentralizados basados en tecnología ‘blockchain’.
Además, las soluciones avanzadas de ‘blockchain 4.0’ pueden ayudar a los usuarios del metaverso a regular sus requisitos de seguridad y confianza. Por ejemplo, en una plataforma de juegos en el metaverso, dentro del mundo de un juego los usuarios podrán comprar, poseer e intercambiar objetos que adquieren en el mundo real un valor potencialmente enorme. Para evitar la falsificación de estos activos, se requerirá una prueba de titularidad mediante algo tan inmutable y escaso como los NFT.
Las soluciones de ‘blockchain 4.0’ pueden ayudar a cumplir siguientes requisitos de desarrollo del metaverso:
- Descentralización
- Gestión de datos descentralizada
- Seguridad
- Prueba digital de titularidad
- Colección digital de activos (como los NFT)
- Gobernanza
- Transferencia de valor mediante criptomonedas
- Interoperabilidad
En última instancia, la ‘blockchain 4.0’ permitirá a las empresas e instituciones migrar sus operaciones actuales a aplicaciones seguras y autorreguladas basadas en libros de contabilidad descentralizados y cifrados, sin necesidad de emplear otros mecanismos de confianza.
Ahmed Banafa, Autor de los libros:
Secure and Smart Internet of Things (IoT) Using Blockchain and AI
Blockchain Technology and Applications
Referencias
“Blockchain Technology and It’s Applications “Course by Prof. Ahmed Banafa -Stanford University
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