Según los expertos, las plataformas de crowdfunding ofrecen cinco ventajas clave: Eficiencia, alcance, facilidad de presentación, marketing y RRPP integrado y validación de conceptos casi inmediata, lo cual explica por qué se ha convertido en una alternativa extremadamente útil al capital riesgo y ha permitido a proyectos menos tradicionales, como los iniciados por familias necesitadas y creativos soñadores, a dirigirse a un nuevo público para tratar de convencerles con sus ideas. Hasta la fecha, las iniciativas de crowdfunding (o micromecenazgo) han recaudado un total de 34.000 millones de dólares y su aportación a la economía mundial se calcula en unos 65.000 millones de dólares, mientras que la valoración de todos los proyectos financiados a través de plataformas de micromecenazgo se estima en unos 90.000 millones de dólares, más de lo que han dedicado a este tipo de causas los inversores de capital riesgo. 2
Limitaciones de las plataformas de crowdfunding actuales1
- Altas comisiones: las plataformas de crowdfunding aplican una comisión por cada proyecto que promocionan. En ocasiones se trata de una comisión fija, mientras que en otros aplican un porcentaje total sobre el total aportado por los inversores. Esta comisión limita la disponibilidad de fondos y dificulta el proceso de acumulación de fondos para las empresas impulsoras de estos proyectos, para quienes cada dólar cuenta.
- Letra pequeña y normas: No todas las plataformas admiten incluir servicios en sus listados de posibles proyectos a financiar y exigen productos reales y tangibles.. Esta mentalidad que dificulta la innovación y limita las posibilidades para la aparición de nuevos productos y servicios.
- Falta de apoyo publicitario o de márketing: salvo en contadas excepciones, las plataformas no suelen ayudar a los emprendedores a publicitar sus proyectos. El gasto en marketing y o publicidad contribuye a incrementar la carga financiera de estos proyectos, impidiendoles centrarse al 100% en labores de innovación y creatividad.
- Fraudes: Ha habido casos de hstartups que han resultado ser fraudes cuyo único objeto era sustraer fondos engañando a los inversores con falsas promesas de productos, sin que los inversores hayan tenido posibilidad de recuperar su dinero.
- Falta de protección a la propiedad Intelectual: En algunos casos, las startups no son conscientes de la necesidad de garantizar la protección de su propiedad intelectual, lo cual pone sus proyectos a merced de otros inversores experimentados, capaces de aprovecharse de sus ideas para desarrollar y comercializar productos similares y llegar antes al mercado gracias a su mayor capacidad en recursos.
De las muchas soluciones que ofrece la tecnología blockchain para la problemática que afecta a las plataformas de crowdfunding, una de las más interesantes es su capacidad para establecer hitos verificables como condicionantes para la liberación de fondos, con contratos inteligentes capaces de ejecutar las transferencias de fondos tras verificar que el dinero se está utilizando para los fines acordados gracias al cumplimiento de dichos hitos. Ofreciendo una mayor capacidad de supervisión a las campañas individuales y reduciendo el nivel de confianza que se debe generar para convencer a los inversores de efectuar sus aportaciones, permitiría incrementar la legitimidad de las plataformas de crowdfunding como alternativa de financiación para un mayor número de proyectos y causas. 2
Cómo ayuda el blockchain al crowdfunding
- La magia de la descentralización: las startups no necesitarían recurrir a ninguna plataforma o combinación de plataformas para permitir a los creadores acceder a financiación. Las startups no se verían obligadas a aceptar las normas, reglamentos y antojos de las plataformas de crowdfunding más populares actuales. Literalmente, cualquier proyecto tendría la posibilidad de alcanzar un nivel óptimo de visibilidad para atraer inversores. También elimina el problema de las comisiones. A pesar de que el mantenimiento de blockchain cuesta algo de dinero, permite reducir drásticamente el coste de las transacciones. Esto permite reducir el coste del crowdfunding tanto para creadores como inversores. 1
- Tokenización: en lugar de utilizar las plataformas de crowdfunding para aceptar pedidos anticipados para productos tangibles, blockchain permitiría recurrir a la tokenización de activos para ofrecer a los inversores una participación en la estructura del proyecto, de manera similar a una emisión de moneda virtual. De esta manera, los inversores pueden disfrutar de un nivel de éxito proporcional al de la empresa. Y esto podría abrir las puertas a un nuevo mundo de oportunidades de inversión. Las startups podrían ahorrar dinero en la contratación de empleados, ofreciéndoles participaciones en la empresa, dando lugar a proyectos de los que ellos mismos serían propietarios. Bajo este modelo, los tokens representativos de activos pasarían a convertirse en una especie de moneda virtual, lo cual permitiría a las organizaciones incrementar las contrataciones de servicios de marketing y publicidad.1
- Alta disponibilidad y provisión inmediata: cualquier proyecto que utilice un modelo de crowdfunding es susceptible de ser financiado. Cualquier persona con una conexión a internet puede aportar a estos proyectos. Los proyectos de crowdfunding con blockchain no tendrían que preocuparse sobre casos de fraudes como los que se han dado en las plataformas actuales. Los inversores recibirían inmediatamente una participación sobre la empresa. 1
- Contratos inteligentes para garantizar el cumplimiento de los términos de financiación: los contratos inteligentes que hace posible la tecnología blockchain permiten incrementar el grado de exigencia sobre los proyectos de crowdfunding en lo que a cumplimiento de condiciones y términos de financiación se refiere. Estos contratos permiten definir e incorporar hitos de cumplimiento para condicionar la transferencia de los fondos evitando la necesidad de verificar la legitimidad de un proyecto o campaña. De esta manera se evitaría que se desaprovecharan grandes sumas de dinero en proyectos diseñados con malas intenciones o por gente que, directamente, no está preparada para llevar a cabo una campaña de crowdfunding. 2
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