El equilibrio es una falacia para Stewart D.Friedman. El llamado work / life balance está obsoleto. La armonía es la clave para una vida plena. Trabajo, familia, amigos… no son ya ámbitos independientes, sino interconectados y capaces de influenciarse positivamente.
Las nuevas tecnologías, la evolución de los roles de género, y la nueva empresa, en la que las formas de trabajo están evolucionado, han creado un contexto socio-cultural que afecta a la toma de decisiones profesionales y familiares. ¿Cómo piensan las nuevas generaciones en la familia? ¿Será posible para los jóvenes, los llamados millennials (o generación del milenio), conciliar sus aspiraciones laborales y familiares?
Steward Friedman es una de las figuras de referencia mundial en cuanto a la perspectiva trabajo / familia en el mundo de los negocios. Con más de 30 años de experiencia como profesor, investigador y consultor privado, Friedman condensa lo mejor de su trayectoria en su último libro, “Leading the Life you Want: Skills for Integrating Work and Life” (“Tener la vida que quieres: habilidades para la integración del trabajo en la vida”), una práctica guía de ejercicios y ejemplos para aprender a dirigir la vida que quieres vivir.

Friedman presenta en su libro 6 líderes de éxito con 6 historias particulares, personas que según su criterio han alcanzado la deseada armonía. Cada uno ejemplifica una serie de cualidades: Bruce Springsteen o Michelle Obama son algunas de las caras elegidas para ilustrar lo que, a su juicio, es una prueba del éxito: la armonía a la hora de repartir el tiempo y la dedicación entre los distintos ámbitos de la vida. El trabajo no lo es todo y el tiempo invertido en la oficina, ya no asegura el éxito.
Las nuevas generaciones ocupan cada vez más tiempo en el trabajo, renuncian a la paternidad más fácilmente y no cuentan con la flexibilidad necesaria para tener una vida plena al margen de su actividad laboral. La generación Y (generación del milenio) no tiene el control sobre la distribución de su tiempo.
En su artículo para OpenMind, Friedman explica cómo las empresas deben reconocer y respetar todos los ámbitos de la vida: trabajo, casa, comunidad y el espacio con uno mismo, y dar a los individuos las herramientas y el apoyo necesario para que puedan vivir la vida que quieren. No es una cuestión de altruismo. La empresa debe velar por la productividad y el talento. Mantener a los mejores empleados asegurandose de que puedan desarrollarse plenamente y vivir la vida que ellos han elegido, dentro de la empresa que los ha elegido a ellos.
Comentarios sobre esta publicación